Los perros del Refugio Municipal de Contención Animal siguen recibiendo mimos.
Un gran trabajo se tomó la familia Padilla que se propuso construir una cama para cada canil.
Por su parte, Nataly y Daniela Salinas llevaron ponchitos que ellas mismas confeccionaron a mano.
Los abrigos fueron destinados a los animales de mayor edad o que están en recuperación, para ayudarlos a pasar más calentitos las jornadas de baja temperatura que registra la ciudad.